Tu campaña de crowdfunding será un éxito si una amplia comunidad se siente identificada con tu proyecto y desea hacerlo realidad, tenerlo en sus manos. Bien sea porque la comunidad te respalde como autor por tu trayectoria profesional o personal, o porque sea una comunidad concienciada por la temática que tratas en el libro, es importante saber identificarla y organizarla para tener éxito.
Ordenando nuestra comunidad: los círculos concéntricos
Una de las estrategias más importantes que utilizamos para preparar y desarrollar una campaña de crowdfunding son los “círculos concéntricos”. Es una forma muy visual de organizar la red de contactos de un autor y preparar las tácticas que animarán a todos ellos a convertirse en mecenas, ¡tanto conocidos como desconocidos!
Esos círculos contienen a todos los posibles mecenas que puede conseguir una campaña. Los canales y el momento de comunicación de la campañaa estos potenciales mecenas es diferente en cada caso, dependiendo de en qué parte del círculo se encuentren.
Con este método de trabajo tratamos de crear un “efecto llamada”: los primeros mecenas –personas más cercanas al autor– atraen a otros mecenas, que atraen a otros mecenas –que pueden ser conocidos o compañeros de trabajo del autor–… Hasta que el grupo tiene la suficiente fuerza para atraer a muchas personas más, muchos de ellos ya desconocidos para el autor. Es decir, siempre empezamos la comunicación desde el centro hacia fuera.
Empezando a comunicar nuestra campaña: el núcleo de la comunidad
¿Quiénes son el núcleo de una comunidad de mecenas? El círculo personal del autor –familiares cercanos, amigos íntimos, personas de confianza que apoyan todos tus proyectos– suelen ser los primeros mecenas de una campaña.
Es importante movilizar primero a estas personas: una base de apoyos desde el primer día hace tu campaña atractiva y transmite confianzaa los desconocidos.
La comunicación con el núcleo de la comunidad suele ser bastante personal: por mensaje (Whatsapp, por ejemplo), teléfono o incluso en persona, boca a boca.
Segundo paso: es hora de retomar viejas amistades
En este punto encontramos el círculo de personas más amplio y complicado de abarcar: nuestra recomendación es llevar un lista de aquellas personas con las que ya se ha contactado, aquellos que han prometido apoyar más adelante, los que todavía no han sido contactados…
Y es que en este punto encontramos a la mayoría de conocidos del autor: compañeros de colegio, instituto y estudios, compañeros y excompañeros de trabajo, amigos en redes sociales, vecinos, parientes lejanos, compañeros de hobbies…
Son personas que pueden o no apoyar tu campaña, pero que tienes identificadas y con las que puedes tener contacto tanto a través de medios de difusión (redes sociales) como mediante canales más directos de comunicación, como mensajería o teléfono.
Tercer paso: encontrar al público objetivo
Una vez activado el círculo más cercano, y también nuestra comunidad de mecenas (¡somos más de 40.000!), es el momento de alcanzar un público más amplio: ya tenemos una base de mecenas que genera confianza sobre nuestro proyecto. Este último círculo abarca a todos los lectores desconocidos que podrían querer comprar el libro, y a los que mueve la curiosidad y el interés por el potencial del proyecto.
Es importante inferir el perfil sociodemográfico de este grupo para poder impactarles, teniendo en cuenta una horquilla de edad, dónde viven o han vivido, profesiones o estudios, intereses… Este punto depende mucho de cada proyecto y lo estudiamos contigo antes de comenzar la campaña.
Para llegar a este círculo, usaremos los canales de difusión: medios de comunicación, blogs, publicidad en redes sociales, conocidos con influencia fuera de nuestros círculos…
Se puede decir que cuánto más amplio es el apoyo de este último círculo, el de desconocidos, más exitosa es una campaña. Sin embargo, depende mucho del tipo de proyecto: los libros más visuales o de temática social suelen tener una gran cantidad de mecenas desconocidos; mientras que los libros más personales, como novelas o poemarios, suelen tener más mecenas del primer y segundo grupo.
Conclusiones
Un crowdfunding editorial necesita comenzar con una base de seguidores –pueden ser familiares y amigos, o conocidos y compañeros que comparten tus mismas inquietudes– que sabes que apoyarán la publicación de tu proyecto y que serán la base de la comunidad que lo rodeará.
La difusión del proyecto a través de medios, blogs, personas influyentes y redes sociales –siempre bien segmentados– hará crecer la comunidad de tu proyecto haciéndolo llegar a personas desconocidas para ti que están dentro del público objetivo de tu libro. Pero recuerda: es importante no empezar la casa por el tejado y trabajar primero con la base de tu comunidad para crear un efecto llamada hacia personas que no te conocen. Hacerlo al contrario será contraproducente para el éxito de tu campaña de crowdfunding.
¿Te animas a intentarlo? Es el momento de rescatar tus proyectos del cajón, ¡nosotros te ayudamos a darles forma y encontrar a tus lectores!
Envíanos tu propuesta aquí: http://bit.ly/2MokIpN
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